El cansancio por los madrugones diarios y la largura de los días hace reflexionar sobre el valor del descanso. Y llegué a una cuestión: ¿Es el descanso ahora lo mismo que lo que fue ayer? Claro que no. He viajado a varias épocas y he tomado muestras de los ronquidos, y el resultado bien corrobora mi hipótesis. He aquí algunas de esas muestras tomadas:
La humanidad ha podido disfrutar de muchos y muy variados descansos. Somos una especie con suerte.
9 comentarios:
Se te va la cabeza... la cabeza?
Yeah. My tiredness is unsmokable...
Mañana subiré tu post a twitter, seguro que se lleva un montón de retuiteos ;)
A mi me ha encantado :D
Oioioi qué halago Lau! Y yo sin twitter... Tengo que ponerlo en marcha ya! Está en mi lista de asuntos pendientes.
uuuuuff, genial entrada! ;)
Pues hazte un twitter cuanto antes, es imprescindible!!además de fácil y gratis XDD y se aprende un montón y una vez que tengas unos cuantos seguidores recibirás muuchas visitas ya verás ;)
Oído cocina. De esta semana no pasa!
si, además cualquier duda tratan de ayudarte ;)
Espero saber desenvolverme. Si no, siempre me quedará el libro Twitter for dummies xD
De esta semana no pasa, me reafirmo!
Publicar un comentario